LOGOTERAPIA, libertad de voluntad
Los pilares fundamentales de la logoterapia son tres como lo acabamos de mencionar en el título, Víctor Frankl plantea la logoterapia dividido en tres grandes bloques: antropología como imagen del hombre y como base de esta la libertad de voluntad, psicoterapia como ciencia médica y como fundamento la voluntad de sentido, filosofía como imagen del mundo y como pilar el sentido de vida. En el cual se puede ver representada la siguiente imagen.
I.
LIBERTAD
DE VOLUNTAD.
La libertad
de voluntad entendida en “quiero” para eso uno se lanza la pregunta ¿qué
quiero? Cada ser humano es libre de querer vivir o no con sentido. El sentido
de la vida se da en la vida misma, de acuerdo a Frankl (2003): “…la voluntad de
sentido… no busca alcanzar el poder ni el placer, ni siquiera la felicidad,
pues su interés es el encuentro de un argumento para ser feliz; es decir, el
sentido es único e irrepetible para cada persona, un constructo que apela a los
pilares de la logoterapia y le confiere a la vida coherencia, orientación,
unidad y dirección”[1].
Cada ser existente busca el por qué vivir Nietzsche nos dirá "Quien tiene
un porque para, vivir, encontrará casi siempre el cómo".
Víctor
Frankl resistió y lucho hasta el final en los campos de concentración gracias a
que siempre tenía claro por qué vive y para que, vino a este mundo. Cuando
queremos decir libertad lo primero que se nos viene a la mente es la pregunta ¿es el ser humano libre? “la
persona no siempre es consciente de su propia libertad y de sus motivaciones
para la decisión y más en una sociedad
en la que pretender reducir la libertad a consumo, dinero, poder, sexo,
vértigo…”[2] se ha llegado en nuestros
tiempos a una situación que la libertad se entiende desde el punto de vista de
abandono. Separa libertad de responsabilidad, al contrario mientras más
responsable sea uno más libre se verá. Eso si queremos definir libertad.
En
el libro el hombre en busca sentido Frankl dice: “… la libertad espiritual, que
no se nos puede arrebatar, lo que hace que la vida tenga sentido y propósito.
Hablar de libertad nos lleva a entrarnos en un mundo sin salida, debido a que
tiene muchas acepciones. En la cual sobre salta la otra pregunta “qué es la
libertad” muchos dirán que es la capacidad de elegir, de saber gobernar nuestra
propia vida, hacer lo que me plazca, etc.
Por
otro lado defiendo el “sentido”, en la logoterapia, es una “percepción
afectiva-cognitiva de valores que invitan a la persona actuar de un modo u otro
ante una situación particular o la vida en general dándole a la persona
coherencia o identidad personal… no todo lo que interpretamos nos llena de
sentido… el sentido es un significado personal… una interpretación correcta en
la perspectiva correcta, entendiendo lo correcto como lo que más vida
construye y no necesariamente como más
placentero o lo que a mí se me ocurre. (Martínez Ortiz, 2009: 8 y 11). Si
juntamos tal vez las dos palabras libertad y voluntad sería más o menos así, gobernador de mi vida, claro si
entendemos la libertad como responsabilidad, la magnitud de mi responsabilidad
ante mis actos me hace más libre; y
sentido como acto o interpretación de mis decisiones, en tanto que pueda llegar
hacer un verdadero gobernador de mi vida sin que ninguna influencia exterior ni el interior pueda vencerme.
1.1. SER ÚNICO
El
ser humano es único, Víctor Frankl
logró descubrirse como un ser único cuando se dio cuenta que a pesar de que
eran varios los que estaban viviendo esa tortura de los campos, cada ser
interpretaba de manera diferente el momento a pesar que la situación era la
misma. Todos los seres son diferentes, no hay dos seres iguales ni los que
nacen a la misma hora ni de la misma
madre.
El
tomar conciencia de mi ser único, hará que yo pueda valorarme más, porque si no
me valoro no podré valorar a los otros. De la misma manera que si no veo a los
demás como seres únicos, no me veré interpelado de cuidar y amar a esos seres
irrepetibles. El ser consiente de mi ser único me lleva al crecimiento y
reconocimientos de mis valores y el adecuado uso de mi libertad y ser un buen
gobernador de mi vida, a la vez podré percatarme del “Tú” (como el otro) en
tanto que reconozco que mi libertad se acaba cuando empieza la libertad del
“Tú”.
La
contemplación de un acto como por ejemplo de una clase de lengua sobre el
sustantivo, será único e irrepetible, debido a que el ser que lo dicta es único
y cada ser que lo escucha también, y cada uno lo ha entendido de diferente
manera a pesar que fueron enseñados por el mismo profesor. Por lo tanto que si
esos mismos alumnos volvieran el próximo año a escuchar esa misma clase no será
la misma por que la situación ya es diferente aunque la clase allá sido grabada de la anterior, porque será la copia
de la clase primera, y aunque no haya sido gravada no se podrá dar una igual
como se dio. Eso es un ejemplo claro que nuestra autenticidad no nos permite percibir,
situaciones iguales aunque sean la misma, debido a los seres irrepetibles que
somos.
Escrito por: Jaime Marreros tananta, Estudiante de Psicología en la Universidad, Inca Garcilaso de la Vega. Cursa también estudios de Filosofía en el Instituto de Estudios Teológicos Juan XXIII.
BIBLIOGRAFÍA
1.
MARTÍNEZ ORTIZ, E. (2009). Buscando el
Sentido de la Vida, manual del facilitador. colectivo aquí y ahora, Bogotá
2.
Frank, V. (2003). Logoterapia y análisis
existencial. Barcelona: Herder. 3ª ed.
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